Caracas, 13 de agosto de 2025 (Prensa Mincomunas).- “La historia es la clave fundamental de una nación. Una nación que no conoce sus orígenes, sus luchas, sus idearios, sus héroes es una nación que anda sin rumbo, sin brújula”. Así lo declaró el politólogo venezolano Alexander Yánez Deleuze.
Durante su participación en el programa “En clave comunal”, el diplomático venezolano manifestó que la relectura del pensamiento de Simón Bolívar es una necesidad estratégica para la Comuna venezolana.
“Es una clave fundamental que nos ofrece la historia, sobre todo en un país como Venezuela, que ha tenido héroes de enorme trascendencia: no solo el Libertador Simón Bolívar, sino también Antonio José de Sucre, Francisco de Miranda, Rafael Urdaneta, y tantos hombres y mujeres que combatieron durante el proceso de concepción de la independencia. Incluso antes, durante el proceso de colonización, las luchas de los caciques y las cacicas de nuestra Caracas, de nuestras regiones llaneras, insulares y amazónicas”, recordó Yánez Deleuze.
Insistió en que, para la Comuna venezolana, es primordial conocer todo esto “porque un pueblo requiere tener identidad y la identidad se la dan sus referentes históricos”, dijo.
Aseguró, además, que el acervo histórico de las luchas coloniales, de independencia y de construcción nacional nos siguen aportando claves esenciales.
Historia profunda
Alexander Yánez, embajador de Venezuela ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Ginebra, expuso que la colonización de América no fue solo territorial, sino también mental. “Las formas de hacer, de actuar y de concebir la vida que trajeron los colonizadores europeos se convirtieron en sentido común”, señaló.
Planteó que la mejor manera de romper con el sentido común moderno es darse cuenta de que hay una “historia más profunda” de la historiografía que nos han enseñado, por lo que resulta clave remitirse a las fuentes primarias.
“La mejor manera de romper con la colonialidad del pensamiento es remitirse a las fuentes primarias, el pensamiento originario de Bolívar, de Urdaneta, de Sucre, de todos aquellos que participaron en los procesos de independencia. Ahí está la clave de la identidad nacional, está la clave del proyecto nacional venezolano”, afirmó.
El investigador refirió el Discurso de Angostura para explicar cómo Bolívar concibió la independencia como una ruptura radical con la “opresión organizada”.
“Comprender que era necesaria la existencia política de una nación llamada Venezuela es el fundamento político de la independencia. Eso supuso romper con el orden, con la opresión organizada ―que Bolívar señalaba en el Discurso de Angostura―. ¿Qué es la opresión organizada? La opresión organizada es la institucionalidad colonial que fue impuesta en Venezuela, que tenía unos códigos, unas normas, unas formas de hacer, sobre la base del Estado monárquico”, explicó.
En tal sentido, alegó que, para entonces, Bolívar planteó la necesidad de una nueva república llamada Venezuela. “Fue disruptivo, rompió con el sentido común monárquico y creó ―lo que llama Gramsci― el buen sentido, la nueva idea, el momento ético-político de la nueva república, con una nueva idea basada en la libertad, en la igualdad, con base en las garantías sociales”, mencionó.
Existencia política y la unidad
Durante la conversa con la moderadora del programa, Nerliny Carucí, el politólogo con maestría en Historia Militar, Alexander Yánez, profundizó en dos conceptos que, a su juicio, constituyen el núcleo del pensamiento político de Simón Bolívar.
“Dentro de todo el acervo conceptual que nos deja el Libertador en sus documentos fundamentales, desde el Manifiesto de Cartagena, la Carta de Jamaica, el Discurso ante el Congreso de Angostura, y todos aquellos grandes documentos que escribió Bolívar, hay una serie de conceptos muy importantes. Yo destaco en el libro Bolívar: pensamiento político y planificación de la guerra que hay dos esenciales: uno, el concepto de la existencia política y, dos, el concepto de unidad”, determinó.
Apuntó que estos conceptos se retroalimentan entre sí. “No puede haber existencia política, si no hay unidad en las fuerzas patrióticas. No puede haber existencia de una nación, si no hay unidad de mando en el ejército. Así que estos dos conceptos se constituyen en un motor esencial del pensamiento político del Libertador, que luego lleva a la acción a través de la guerra de Independencia. Toda operación de guerra desarrollada por el Libertador Simón Bolívar tuvo antes un fundamento político”, argumentó.
Relató que el Libertador tuvo que concebir la idea de una república llamada Venezuela en lo político para luego actuar con las fuerzas militares en la consecución de la independencia. “De tal manera que ese sería un primer nivel. Y un segundo nivel ―y he aquí la trascendencia de Bolívar― es el llamado a construir la gran nación latinoamericana y caribeña, en los términos de hoy, la gran unidad latinoamericana y caribeña, a través del Congreso Anfictiónico de Panamá de 1826”, puntualizó.
“¿Qué es lo que estaba diciendo Bolívar? Decía: América debe existir como gran nación. Y eso solo es posible si nos unimos”. Ahí, expresó Alexander Yánez, “se ve mucho más claramente cómo el concepto de existencia política y el concepto de unidad se retroalimentan”, detalló.
Pensamiento de Simón Bolívar
En el calor del diálogo, el embajador Alexander Yánez recalcó que, para comprender el pensamiento de Simón Bolívar, “tenemos que enfocarnos en su tiempo y en sus circunstancias. Si bien es cierto que su pensamiento trasciende las circunstancias, Bolívar no podía pensar en el capitalismo, porque aún no se entendía el capitalismo como ideología, como fundamento económico o político. Pero sí existía el Estado monárquico, y el Estado monárquico, desde la perspectiva bolivariana, era opresor de los pueblos y de las nacientes ideas republicanas. El orden establecido por el Estado monárquico debía ser enfrentado”, observó.
No obstante, manifestó que el ideario bolivariano —libertad, igualdad, autodeterminación— sigue siendo vigente en el contexto actual, marcado por la hegemonía imperial de Estados Unidos.
“Estados Unidos, tratando de cumplir —si queremos hacer el paralelismo— el rol del imperio español, nos permite encontrar ciertas circunstancias paralelas; no idénticas, pero sí comparables. Digamos que Bolívar tuvo la visión de dejarnos todo un acervo conceptual que hoy nos permite llamar al proceso político venezolano “Revolución Bolivariana”, que no es solo una revolución focalizada en Venezuela, sino una revolución que, por sus ideas y planteamientos, trasciende ese territorio y se expande, como en su momento se expandieron las ideas del Libertador Simón Bolívar sobre unidad e integración. Entonces, sí: hay muchos elementos del pensamiento de Bolívar que podemos utilizar para explicar las circunstancias actuales, bajo —claro está— tiempos y elementos distintivos, pero que en el fondo plantean la libertad, la independencia, la unidad y, sobre todo, la existencia política”, subrayó.
Aseguró que todas las acciones que emprende el Gobierno de los Estados Unidos contra Venezuela —bloqueos, campañas de desprestigio, medidas coercitivas unilaterales— pretenden borrar la existencia de la nación caribeña.
“Cuando ustedes ven en las redes sociales [digitales], en medios de comunicación, una campaña contra el Libertador Simón Bolívar, una campaña de detracción contra sus ideas, ¿qué están tratando de hacer? Están tratando de borrar la existencia del ideario del pueblo de Venezuela. Eso no es casualidad: eso está muy bien pensado y tiene el propósito de desorientar al pueblo, para que pierda sus referentes históricos y también pierda sus referentes de acción transformadora nacional e internacional”, resaltó.
Bolívar y la naturaleza no humana
Sobre el planteamiento que hace Alexander Yánez Deleuze acerca de la recuperación que propone Simón Bolívar —no solo del equilibrio de América, sino del equilibrio del universo—, la periodista Nerliny Carucí preguntó: ¿Cuál es la visión de Bolívar sobre la madre tierra como sujeto de otra forma de vida? El historiador respondió que el Libertador tenía una gran conciencia sobre el rol de la naturaleza no humana.
“Hay una faceta de él poco conocida, que tiene que ver con el Bolívar conservacionista, el Bolívar naturalista. Hay muchos pasajes en sus cartas donde él —yo podría decir el precursor Bolívar, el precursor del cuidado de la naturaleza— hace referencias a la importancia de la madre tierra. Hay decretos de Bolívar sobre la construcción de acueductos, siempre conservando los cauces de los ríos, respetando el cauce de los ríos. El Libertador sí tenía un conocimiento de la trascendencia de la naturaleza [no humana] y cómo la relación con ella debía ser armónica”, evocó.
Indicó que, cuando Bolívar habla del equilibrio del universo, no lo hace solamente en términos geopolíticos, “lo hace también desde el punto de vista de una relación armoniosa con el entorno, con los espacios montañosos, acuíferos, con los animales que nos proveen de la carne para la alimentación. No nos habló de la Pachamama, no con ese término, pero sí de la naturaleza, como la denomina Occidente. Es decir: Bolívar tenía una gran conciencia sobre el rol de la naturaleza”, rememoró.
En tal sentido, Yánez Deleuze llamó a profundizar el legado del Libertador Simón Bolívar en materia ambiental.
Tres máximas de Bolívar
En el transcurso del programa, un comunero del estado Mérida —vía mensaje de texto— planteó la pregunta de “cómo contextualizar en nuestros tiempos tres máximas de Bolívar”: uno, lo que debe garantizar el mejor sistema de gobierno; dos, la integración regional como equilibrio del universo; y, tres, el despeje de la misteriosa incógnita del hombre en libertad.
Para Alexander Yánez, estas ideas condensan la profundidad del pensamiento bolivariano y ofrecen claves concretas para la situación actual. “El tema de la seguridad social tiene que ver con la protección del pueblo. La estabilidad política tiene que ver con la necesidad de acabar con las confrontaciones, con la guerra; eso se logra a través de un proceso de unidad nacional. Y la felicidad es como el logo último del ser humano. Todo el mundo quiere ser feliz. Y la felicidad no es algo que se alcance en el futuro. La felicidad es un estadio cotidiano de la vida diaria. Por eso es que él habla de seguridad social, porque la seguridad social debe manifestarse todos los días. No es algo que tú vas a conseguir en el futuro, ¡no! Es algo de todos los días. La estabilidad política igual”, explicó.
De acuerdo con el historiador venezolano, la felicidad es precisamente transitar la vida con todos esos elementos garantizados. “La seguridad social, la estabilidad política y vivir tu vida con la posibilidad de resolver las necesidades básicas de manera digna. El despeje de la misteriosa incógnita del hombre en libertad, esa incógnita fue resuelta en tiempos de Simón Bolívar, truncada en alguna medida en la imposibilidad de lograr lo que ventila el tercer momento que dice el comunero: la unidad de nuestra América”, platicó.
Para Yánez, las tres máximas bolivarianas no son solo frases históricas, sino principios que hoy nos orientan hacia un nuevo orden ético-político y a la construcción del horizonte comunal.
“No solo están vigentes, sino que siguen expandiéndose en acervo de logro colectivo hacia el futuro. Hay que seguir construyendo la libertad, la unidad y la integración continental, y propiciar la paz. ‘La paz es mi puerto’ —decía Bolívar—: en estas circunstancias de hoy, ese es un pensamiento que sigue presente”, sostuvo.
Bolívar: un pensamiento en expansión
Para culminar su participación en el programa “En clave comunal”, Alexander Yánez Deleuze, uno de los autores del libro Líderes del Alba. Apuntes para pensar aquí y ahora la independencia de América Latina y el Caribe, señaló que el pueblo venezolano puede encontrar en su historia referentes fundamentales para comprender cómo en las peores circunstancias de la guerra de Independencia se pudo sobreponer la lucha popular —acompañada de un liderazgo— para sobrellevar las dificultades económicas y, finalmente, vencer al imperio más poderoso de su tiempo: el Imperio español.
Reiteró que el pensamiento de Simón Bolívar es un pensamiento en expansión. “Es como la teoría del big bang, cuando se creó el universo, una gran explosión, es el universo en expansión permanente. ¡Así es el pensamiento de Bolívar!”, enfatizó.
Invitó a aferrarnos a Bolívar: “Leamos a Bolívar. Busquemos a Bolívar cuando tengamos dudas, cuando tengamos temor, cuando creamos que las cosas son difíciles, leamos a Bolívar. Ahí está la respuesta para la grandeza de este pueblo”.
Redacción: José Tomedes Gutiérrez