Caracas, 30 de julio de 2025 (Prensa Mincomunas).- En la sede del Ministerio del Poder Popular para las Comunas, Movimientos Sociales y Agricultura Urbana, se desarrolló una mesa de trabajo de articulación interinstitucional con el firme propósito de fortalecer el acompañamiento integral y la materialización de políticas públicas con pertinencia cultural, en las instancias y organizaciones del Poder Popular indígena.
Actualmente, Venezuela cuenta con aproximadamente 2.744 Consejos Comunales indígenas distribuidos en diversas regiones del país. De ese total, 341 están articulados a 52 Comunas, las cuales se organizan respetando las particularidades culturales y territoriales de los pueblos originarios.

Frente a este escenario, el viceministro del Sistema de Formación Comunal, Carlos Rodríguez, subrayó la necesidad de impulsar procesos de formación profundamente sensibles y contextualizados con respecto a las Comunas, Consejos Comunales y Circuitos Comunales.
A partir de experiencias previas con jóvenes pemones en Bolívar, explicó cómo el intercambio de saberes entre juventudes criollas e indígenas permitió derribar estigmas, fortalecer liderazgos y generar reconocimiento mutuo, siendo espacios que demostraron que, para avanzar en la integración efectiva, es imprescindible fomentar el respeto intercultural y la valoración de las formas propias de organización que han sostenido históricamente a los pueblos originarios.
“La tarea que tenemos no es solo reconocerlos, sino ir más allá, reivindicarles y acompañarles como sujetos de transformación en el marco del respeto a sus formas de usos y costumbres. Como instituciones, debemos entender cómo acoplarnos a sus dinámicas propias y no al revés” sentenció el viceministro Rodríguez.

Por su parte, el viceministro para la Organización y Participación Comunal y Social, Ronald Solé, enfatizó la necesidad de construir una relación con los territorios basada en el reconocimiento real de las dinámicas propias de cada pueblo originario. Señaló que el trabajo institucional no puede limitarse al cumplimiento de metas administrativas, sino que debe orientarse a una presencia activa, respetuosa y coherente con las formas de vida comunitaria.
En ese sentido, subrayó que la estructura del Consejo Comunal, tal como ha sido concebida desde una lógica general, no siempre se ajusta a la concepción colectiva de pueblos como los yukpas, cuyo entendimiento de la familia y de la organización comunitaria es más amplio y diverso. Por ello, insistió en que cualquier proceso de acompañamiento debe partir desde la lógica interna de cada comunidad, reconociendo su visión del mundo como base para la acción transformadora.
“Es hora de generar un nuevo tipo de acompañamiento: sin colonizar, sin imponer. Necesitamos un mapa situacional real, una sistematización que permita entender cómo intervenir, desde dónde y con qué herramientas. Y debemos garantizar que las Comunas indígenas participen activamente en las próximas Consultas Populares”, expresó Ronald Solé.

A su turno, el director general de la Fundación para el Desarrollo y Promoción del Poder Comunal (Fundacomunal), Nixon Álvarez, alertó sobre las limitaciones estructurales que afectan el avance de la organización indígena, como la falta de procesos de cedulación, que impide renovar muchos Consejos Comunales. “Muchos Consejos Comunales no pueden renovarse porque primeramente es necesario realizar jornadas de cedulación en los pueblos indígenas. Es urgente una articulación institucional para solventar este nudo crítico” puntualizó.
Álvarez también destacó la necesidad de incorporar liderazgos indígenas a los procesos de acompañamiento y conformación de nuevas estructuras organizativas: “Debemos impulsar nuevos Consejos Comunales indígenas con compañeros de los propios territorios. Ellos deben ser protagonistas de su proceso, no receptores de un modelo que muchas veces ignora su cultura y cosmovisión”.
Desde una mirada de respeto, interculturalidad y justicia social, las instituciones avanzan en la construcción de un modelo que se adapta a los territorios, no que los uniforma, reivindicando así el legado del comandante Hugo Chávez, quien siempre defendió la participación protagónica de los pueblos originarios.
